La jueza Andrea Calaza, del Tribunal Oral N° 4 de Quilmes, condenó a Mauricio Sánchez a prisión perpetua por el femicidio de Melissa Kumber. El expolicía federal asesinó de un disparo en la cabeza a su expareja y madre de su hijo el 20 de junio de 2019.
Cabe recordar que el pasado sábado, un jurado popular integrado por 12 vecinos de Quilmes, Berazategui y Florencio Varela, lo declaró culpable del femicidio. Además de la condena, se dictó inhabilitación por 10 años para ejercer cargos públicos y para tenencia y portación de armas de fuego.
El femicidio de Melissa Kumber
El hecho ocurrió el 20 de junio de 2019, en una casa ubicada en Quilmes Oeste, sobre la calle San Juan. Sánchez le disparó a Kumber a la altura de la sien, lo que le provocó la muerte de manera instantánea. Junto a ellos, estaba su pequeño hijo de apenas 7 meses de edad.
Tras el crimen, Sánchez se comunicó con el 911 y aseguró que el disparo se produjo durante una discusión de pareja. “Ella me tiró y yo le tiré, y le pegué en la cabeza. Yo también estoy herido”, les afirmó a los oficiales que se acercaron al domicilio. Previamente, Melissa lo había denunciado en cuatro oportunidades por violencia.
Aunque alegó legítima defensa y aseguró que la mujer le disparó primero en el hombro, la fiscal Karina Gallo ordenó su detención. Luego, elevó el caso a juicio, donde fue acusado de “homicidio agravado por el vínculo y por femicidio”.
Varias pruebas demostraron que se trató de un femicidio y no de un enfrentamiento. Entre ellas, el dermotest, en el que se hallaron rastros de pólvora sólo en la mano derecha del imputado. La víctima no tenía indicios de haber manipulado un arma de fuego.
