Gran cantidad de fieles se reunieron en la Ribera de Quilmes para rendir tributo a Mae Oxum, la dueña del agua dulce.
Esta ceremonia en la que arrojan flores, velas, arroz y barquitos de madera en la costa quilmeña ocurre todos los 8 de diciembre.
La Ribera de Quilmes se convirtió en el punto de encuentro por excelencia, ya que se albergo a fieles de distintos puntos de la Provincia, que llegaron en micros e incluso hasta con una semana de anticipación.