Mario Sciacqua definió el equipo que saldrá a jugar mañana desde las 21.30 en el Centenario. Todo listo para el partido contra Estudiantes de Caseros que tendrá a Diego Ceballos como árbitro.
El técnico hará dos variantes luego de la derrota ante Brown de Adrogué (0-1).
Todo listo
Para el equipo Cervecero ingresarán Facundo Castro por el suspendido Tomás Sandoval y el paraguayo Brahian Ayala en lugar de Axel Batista.
Así es que el equipo quedaría formado por: Milton Álvarez; Martín García, Gabriel Díaz, Mario López Quintana e Iván Erquiaga. Mario Sanabria, Martín Río, Iván Colman y Brahian Ayala; Facundo Castro y Federico Anselmo.
La buena noticia para el Cervecero es que a pesar de la derrota no se bajó de la punta. Producto de la gran racha de victorias que mantuvo durante los primeros partidos.
El partido fue incómodo desde el comienzo, con 40 grados a la sombra que no permitieron desplegar toda la dinámica del juego. Además, Pablo Vicó hizo un planteo táctico característico a su capacidad y experiencia. Con cinco defensores controló los circuitos de juego que había demostrado Quilmes como gran virtud. Y de contragolpe hizo mucho daño ante cada llegada.
El gol para Brown llegó de pelota parada a través de la cabeza de Mayola. Tras un tiro libre ejecutado por Bellegia. Luego Quilmes no encontró la vuelta para poder empatarlo y el resultado terminó así. 1 a 0 en contra y a pensar en lo que viene que un tropezón no es caída.
El Cervecero jugó un nuevo amistoso de entresemana y goleó al Mate por cuatro tantos contra uno. El partido se jugó en el Centenario.
Los goles fueron convertidos por Bonetto, Arzura, Tevez, Córdoba.
Quilmes formó con: Glellel; Brizuela, Tevez, Giampaoli, Bindella; Bonetto, Arzura, Torres, Capano; Cao y Córdoba. Ingresaron Domínguez por Bindella y Postigo por Torres.
Durante el fin de semana, Quilmes tuvo una mala jornada frente a Brown de Adrogué. En ningún momento pudo encontrarle la vuelta al partido y cayó merecidamente por un tanto contra cero, resultado que podría haber sido más abultado. Un golpe a tiempo para corregir falencias.