Pese a la derrota frente Atlanta y el mal momento que atraviesa Quilmes, una voz salió a bancar al equipo. Se trata de Federico Anselmo, un optimista del gol y del futuro.
El delantero, luego del encuentro, manifestó: “Las cosas van a cambiar, vamos a hacer que cambien”.
Optimista
Si bien el equipo atraviesa un mal momento, el goleador sigue fino con el arco rival. Y analizó: “Nos está costando encontrar una estabilidad, estoy tan dolido cómo el hincha porque no se nos dan los resultados”.
“Entendemos el malestar de la gente, sé que vamos a salir y tengo fe en el grupo de trabajo que tenemos. Y cómo estamos puerta para adentro”, indicó el futbolista del Cervecero.
Con relación al mensaje que llega desde el cuerpo técnico señaló que “nada cambió, lo tenemos en claro. Sabemos cuáles son los objetivos. Vamos a trabajar para dar vuelta esto. Puertas para adentro no hay clima negativo, eso no nos llevaría a nada, no vamos a permitir que eso pase. Hay un clima de bronca. Las cosas van a cambiar, vamos a hacer que cambien”.
Por último, resaltó: “Necesitamos confianza y mente positiva. El club siempre te pone la vara alta, si estamos acá es porque tenemos la decisión clara de querer pelear arriba. Tenemos que desdoblar el esfuerzo. Después de una derrota siempre querés una victoria. Tenemos que seguir todos juntos”.
Quilmes volvió a perder, esta vez como local y bajo el murmullo e incluso la bronca de su hinchada que se mostró cansada ante la situación. El partido fue victoria para Atlanta por 2 a 1 con tantos de Juan Galeano y Nicolás Mazzola. Mientras que Federico Anselmo había igualado de manera transitoria para el conjunto conducido por Mario Sciacqua. La derrota de local dejó secuelas.
La derrota de local
Precisamente sobre el DT se esperan novedades en los próximos días. Ya que se supo que desde hoy hay reuniones con la Comisión Directiva para definir el futuro que no es tan optimista.
Cabe resaltar que ni el entrenador ni los jugadores manifestaron declaraciones en el post partido. Que fue en total silencio también para la parcialidad local que volvió a mostrar su descontento con el rendimiento de un equipo que había empezado el torneo muy bien. De hecho no fue hace mucho que tenía una impresionante racha de victorias al hilo. Pero luego el rendimiento mermó y el equipo ya no pudo encontrar el rumbo. Teniendo derrotas como ésta, que opacan ese gran comienzo y sobre todo lo alejan del ansiado objetivo de ascender.
