El equipo dirigido por Coyette irá contra Deportivo Maipú el próximo sábado a las 15 horas. El partido será en el marco de la última fecha de la Primera Nacional, y el cervecero ya estará pensando en el 2023.
Cabe resaltar que la continuidad del entrenador está en duda. Por lo que también será una situación compleja para el propio Coyette, que tiene muchas chances de salir luego de este encuentro.
Pensando en el 2023
Lo cierto es que para Quilmes se tratará de un mero trámite, ya que quedó afuera de toda competencia. Por lo que la mente estará más metida en lo que vendrá a futuro. Con un 2023 que obliga, por historia, a pelear el ascenso y no volver a encontrarse en una situación similar a la de ahora.
El partido además será complicado para el armado del equipo. Ya que gran cantidad de jugadores están en la enfermería. Esa lista está integrada por: el arquero Nahuel Yzaurralde (molestias musculares), Mario Sanabria (edema óseo en la rodilla izquierda). Adrián Calello (operado de la rotura de ligamentos de la rodilla derecha),Tomás Bottari (rotura de meniscos en la rodilla derecha). Rodrigo Moreira (sobrecarga muscular en el isquiotibial derecho), Emanuel Moreno (fascitis plantar en el pie izquierdo). Federico González (molestia lumbar), Facundo Silva (molestia en la rodilla izquierda), David Drocco (estado gripal). Jesús Camaño (operado de ligamentos en la rodilla derecha) y Federico Tévez (operado de la fractura en la clavícula izquierda).
Otra de las situaciones que molesta a los hinchas. La gran cantidad de lesiones en el peor momento del equipo.
Fin del sueño
Después de dejar una buena imagen en Copa Argentina donde puso en aprietos ni más ni menos que a Boca Juniors. Quilmes volvió a mostrar su peor imagen y Chicago dio el golpe final al sueño cervecero.
Los de Mataderos se impusieron por 2 a 1 en el estadio de Defensores de Belgrano sin la presencia de público.
Golpe final
Nueva Chicago fue el encargado de darle el golpe final a Quilmes. Estaba urgido de una victoria ya que peleaba por no descender. Y Quilmes le simplificó la tarea con su magra producción que recordó a partidos como el de Sacachispas y Tristán Suárez o cuando perdió con San Telmo y Villa Dálmine.
Los goles del equipo de Mataderos fueron de Bustamante a los 54 minutos de partido. Mientras que el segundo llegó a los 67 cuando Guerra aprovechó un error en la marca de Cortave y tras controlar la pelota, sacó un fuerte remate para poner el 2-0. Mariano Pavone volvió a ser el autor del descuento para Quilmes sobre el final del partido.
De este modo se acabaron las aspiraciones de Quilmes para entrar al reducido. Algo que si bien era complicado aun despertaba ilusiones de una remontada debido a cierto ascenso en el nivel del equipo. Ahora, sin reducido ni Copa Argentina, esperan cuatro meses sin competir por nada. Golpe final al sueño.
